23 junio 2015

Y cuidado que nos vigilan

Quizás, y solo quizás de esto se ha hablado un poco quizás demasiado, pero ¿Quién cojones eres tú? ¿Quién te crees que eres? ¿"Un tío simpático"? ¿"La persona más extrema de todas las activistas políticas"?
Voy a hacer otra pregunta ¿Quién eras hace dos, tres, cuatro años? Por mucho que creas que eres el mismo (Que le follen al lenguaje inclusivo), no lo eres y lo sabes, puedes ser mejor, peor, de otra forma, pero no igual. No quiero explicar por qué esto es así, pero si quieres puedes hacer una introspección a tu pasado.
Chachi, este término está no explicado, hasta la mente más simple de América latina y España entendería este concepto, esté o no de acuerdo. Vamos a pasar este tema a un sujeto menos personal: Cualquiera que no seas tú. Sí amigos, esas cosas que se mueven al rededor gracias a sus dos patas (Sillas de ruedas, cochecitos para gordas, hidropropulsores galácticos...) son personas, humanas, gente... Como tú. ¡Wow! ¿Eso quiere decir que tienen sentidos y sentimientos? ¡Exacto! Las personas que nos rodean, más específicamente, nuestros amigos, familiares y conocidos son humanos, con todo lo que ello significa. Cuidado ahora que voy a enlazar: Las personas que nos rodean también cambian con el paso del tiempo, lo que nos lleva a pensar multitud de teorías y cambio de actitud y conducta hacía estas.
Una  de las aplicaciones prácticas a esta información puede ser la actitud que se tiene con alguien que en el pasado, debido a una disputa, se perdió el contacto, ya sea total o parcial ¿Qué pasa si esa persona ha cambiado? ¿Qué pasa si se puede retomar la relación (De cualquier tipo) y volver a disfrutar de una relación social reconfortante? (¿Y si has sido tú el cabrón en verdad?)
Vale, tienes razón, la relación no va a ser la misma que la de antes... Porque no sois las personas que erais antes.

No hay comentarios: